sábado, 7 de diciembre de 2013

Semana Especial Reavivamiento - intercesión


Este día es especial, la intercesión la hacemos por medio de una Santa Cena dentro de un contexto que Jesús vivió, la cena pascual. Gracias a Dios por hacer que un compañero como el pastor Sergio Martorell compartiera con nosotros su trabajo en powerpoint y documento word, todo un programa especial de Cena Judía, donde incluida esta la Santa Cena. Momento que compartimos todos los hermanos en la Iglesia Adventista de Logroño.

Después de una Semana de Oración, gracias a Dios sentimos el Espíritu Santo cada noche, compartiendo con nosotros, haciendo que reflexionemos sobre la importancia de ser instrumentos limpios de Dios. Como recordatorio decir que Dios nos ha llamado a profetizar la pronta liberación de la esclavitud, tal y como hizo con el profeta Ezequiel mostrando ese valle de huesos secos. Enseñandonos que por nosotros mismos, aunque estemos vivos, para Dios es como si estuviéramos muertos, solo la presencia del Espíritu Santo, tal y como ocurrió con ese ejercito que se formó a la orden del profeta, solo el Espíritu hará que nuestra vida tenga un objetivo y no seamos meros objetos decorativos en un mundo de pecado.

También vimos la importancia de esperar estar investidos del Espíritu Santo para poder ir a hacer discípulos. Cristo dio una orden para predicar para luego hacer una contraorden, no hacerlo hasta que el Espíritu Santo esté con nosotros, es así como el mensaje que prediquemos individualmente tendrá el mismo sentido y las personas que nos oirán entenderán que el mensaje viene de uno; Dios.

El proceso que nos lleva esta aptitud es que seremos bautizados por un bautizo que hará purificar nuestras vidas, el bautismo con espíritu y fuego. Si nos dejamos bautizar de esta manera, el Espíritu Santo mostrará cuales son nuestras deficiencias, nuestras debilidades, nuestros pecados o como un hermano me aclaró, las impurezas del oro se le llaman escoria...Por lo que el Espíritu Santo si nos bautiza con fuego, veremos nuestra escoria y podemos apartarla, quitarla, sacarlas de nuestras vidas y sentiremos lo que sintieron los apóstoles en ese primer bautismo.

Ese primer bautismo fue conocido como la lluvia temprana espiritual. Queda por lo tanto la lluvia tardía, que solo recibirán aquellos que con oración y ruego, la pidan al Señor. Aquellos que deseamos imperiosamente que el Espíritu Santo vea nuestras impurezas. Así es como podemos sacar lo malo y quedarnos limpios.

El resultado de todo es que tendremos poder para testificar, tal y como lo tuvo la mujer samaritana al escuchar a Jesús hablar y fue como testigo al pueblo y muchos creyeron por ella, al escuchar al maestro que por dos días quedo entre ellos, muchos aceptaron por tener una experiencia personal con el Señor y el agradecimiento a ella por ser testigo de Jesús.

Por eso ahora nos toca a nosotros el llamado que Jesús hizo en su primera venida. ¿Quieres tu ser pescadores de hombres?

Es en este entorno en el que hicimos la Santa Cena, espero con ayuda de Dios que cada hermano que participó del lavamiento de pies, del vino y del pan, acepten este recorrido para que el Espíritu Santo nos utilice como instrumentos en sus manos y todos aquellos hermanos y amigos que participaron de la Cena Judía, espero con ayuda de Dios, que se hayan acercado un poco más a esos momentos vividos por Jesús con sus discípulos y a interiorizar el significado de lo que representaba cada uno de los productos puesto sobre la mesa.

Aquí dejo el powerpoint en video para que podáis sentir un poco lo que los hermanos sentimos.